Cada año, la mayoría de los colombianos arman un pesebre en casa. Esta recreación del nacimiento del Niño Dios, es el punto de encuentro para realizar la tradicional novena de Navidad, pero ¿de dónde surge? contrario a lo que creen muchos, se realiza en muy pocos países en el mundo e Italia fue el lugar donde nació este símbolo.
Origen del Pesebre
El protagonista de esta historia es el santo San Francisco de Asís, un hombre que se dedicó a los pobres, que renunció a su riqueza para «reconstruir» la Iglesia de Dios.
Un santo que genera empatía con muchas personas dado el amor que le tenía a la naturaleza, los animales y los más necesitados.
El primer Pesebre
En la nochebuena de1.223, Francisco de Asís celebró la Eucaristía representando el pesebre para recordar lo que sucedió en el nacimiento del salvador, pero dicha costumbre se hizo mucho más popular en 1.465 cuando empezó a llegar a otros lugares.
Oración
¡Oh alto y glorioso Dios!, ilumina las tinieblas de mi corazón y dame fe recta, esperanza cierta y caridad perfecta, sentido y conocimiento, Señor, para que cumpla tu santo y veraz mandamiento.
Mensajes de esperanza
Estas son algunas frases de Benedicto XVI cuando era el máximo pontífice, en dichos discursos, el jerarca de la Iglesia mencionó detalles del significado para la iglesia de aquella creación de Francisco de Asis: “Dios es tan grande que puede hacerse pequeño. Dios es tan potente que puede hacerse inerme y venir a nuestro encuentro como niño indefenso, a fin de que podamos amarlo”.
Humildad
“Dios es tan bueno que puede renunciar a su esplendor divino y descender a un establo para que podamos encontrarlo y, de este modo, su bondad nos toque, nos sea comunicada y continúe actuando a través de nosotros”. “Ha elegido como signo suyo al Niño en el pesebre: Él es así. De este modo aprendemos a conocerlo. Y sobre todo niño resplandece algún destello de aquel hoy, de la cercanía de Dios que debemos amar y a la cual hemos de someternos; sobre todo niño, también sobre el que aún no ha nacido”.“El aquel Niño acostado en el pesebre, Dios muestra su gloria: la gloria del amor, que se da como don a sí mismo y que se priva de toda grandeza para conducirnos por el camino del amor”.
Ternura
«Les invito a detenerse ante el pesebre, porque allí nos habla la ternura de Dios. Allí se contempla la misericordia divina que se ha hecho carne, y que enternece nuestra mirada”, expresó el papa Francisco.
Sobre los símbolos navideños
“En particular, cuando veamos calles y plazas de nuestras ciudades adornadas con luces resplandecientes, recordemos que estas luces evocan otra luz, invisible para nuestros ojos, pero no para nuestro corazón. Al contemplarlas, al encender las velas de las iglesias o las luces del Nacimiento y del árbol de Navidad en nuestras casas, ¡que nuestro ánimo se abra a la verdadera luz espiritual traída a todos los hombres y mujeres de buena voluntad!”, expresó el sumo pontífice.
